Alberto Cifuentes y Enrique ya se conocen

Alberto en su etapa rayistaFoto:  web rayo vallecano,com

El actual portero de la UD Salamanca es el mismo que ha defendido con éxito al Rayo Vallecano durante las dos últimas campañas. Si indiscutible fue para Michel en la 05-06 (36 partidos), también Pepe Mel en la 06-07 (33 partidos) le confirió sin dudarlo el “1” rayista. Con 28 años, ha firmado por dos temporadas con los del Helmántico.

Es un portero a estrenar en Carranza. Nacido en Albacete, se formó en la que fue prolífera cantera mallorquinista de los primeros dosmil. En el filial bermellón tuvo tres temporadas muy buenas (del 2000 al 2003). Luego, por edad, firmó cedido por el Ciudad de Murcia en el mercado de invierno de la liga 2003-04. Fue la temporada de su debú en la categoría. En el ya extinto club de Quique Pina coincidió con los Güiza, Font, Iván Amaya, Camuñas, Falcón o el mismo Turu Flores. Al acabar la liga volvió al Real Mallorca, donde estuvo como tercer portero en la 2004-05. A la siguiente, y ya desvinculado del club balear se comprometió dos años con los de Vallecas.

Este fue el primer gol de Enrique como jugador cadista. Alberto, ahora en la UDS, el meta.Foto: archivo/cadistasfinos.com

Esta es en breve síntesis del portero que defenderá la meta charra. La UDS ha renovado con profusión su plantilla, y en la portería ha sido total. Se fueron Felip (al Orihuela) y Tete, mientras que Alberto y Pagola (Guijuelo) han sido las altas.

Lo que quizás no todos recuerden es que Alberto pasó a la historia de un jugador cadista muy querido. Un 24 de abril del 2004, Enrique Ortiz Moruno marcaba su primer gol como jugador amarillo. Pasaba el minuto 90 cuando una figura algo desgarbada anduvo listo para recoger un rechace. La zaga grana pedía fuero de juego, pero no lo era y apareció el más espabilado del cuartel. No golpeó bien Enrique, pero si lo suficiente para que Alberto Cifuentes pasara a la pequeña historia amarilla del de Zafra. Luego llegaron goles más importantes y de Primera. Pero este fue el Primero.