Una decisión muy arriesgada: Stoitchkov entrenará al Celta.
Un golpe de timón. El análisis de los directivos del Celta de Vigo acerca de lo que el equipo celeste requería para evitar el descenso era claro. Hacía falta un golpe de timón en el vestuario y la destitución de Fernando Vázquez estaba cantada. Sin embargo, lo que no era tan esperado era la decisión sobre su sustituto.La única experiencia de Stoitchkov en el fútbol de máximo nivel como entrenador es la de la selección de Bulgaria en la fase de clasificación para el mundial de Alemania 2006. El resultado fue nefasto para Bulgaria porque no logró clasificarse para la cita mundialista.No parece que Stoitchkov sea la persona adecuada. Su conocimiento del Celta de Vigo en estos momentos no puede ser más que limitado. Tampoco parece que sea un experto en las profundidades de la liga española de Primera División. Ni siquiera en la forma de llevar un vestuario. Su única baza es su fuerte personalidad y su carácter de ganador como futbolista.Los ejemplos de grandes futbolistas que fracasan como entrenadores se cuentan por decenas cada año. A los ejemplos de Antonio Maceda, Manolo Hierro, Julen Lopetegui, Juan Señor… se han unido este último año Jose Mari Bakero, Nayim u Oliverio Álvarez, hombres que este año han acabado en el paro como técnicos pese a su fenomenal currículo como jugadores. A ellos, en breve, se unirá Jose Miguel González, Míchel y la lista irá sumando año tras año porque las condiciones futbolísticas no siempre están relacionadas con las capacidades pedagógicas, sicológicas y tácticas necesarias para ser entrenador de primer nivel.El tiempo dirá si la decisión de la directiva del Celta ha sido la correcta o no. El equipo celeste tiene plantilla como para no pasar apuros aunque su situación actual es mucho más que delicada. Más aún cuando sólo quedan nueve partidos, veintisiete puntos para salir de la zona de descenso. De lo contrario, el año que viene volveremos a Balaídos.Enlace relacionado:http://www.cadistasfinos.com/cadiz-cf/4678.html
Autor:JG del Valle
