Increible remontada

Pachón y Velasco rescatan al Cádiz de la zozobra en la que lo sumergió el Roquetas.

 Match-ball para el Cádiz. Tras la buena impresión dada, no sólo en el Sánchez Pizjuán, sino en los últimos cinco encuentros, los amarillos tenían ante sí una oportunidad de oro para dejar, prácticamente certificada, su presencia en el play-off. Para ello tenía que vencer al Roquetas, objetivo más inmediato. Los roqueteros afrontaban también el encuentro como una final: de ganar, tendrían al alcance de la mano el objetivo de jugar la Copa del Rey la próxima temporada. Eso sí, llegaban con la sensible baja de Pablo Pallarés.

 Jose González, que por su sanción de dos encuentros no pudo dirigir a sus pupilos desde el banquillo, repitió la convocatoria de la jornada anterior. Sólo hubo un cambio en el once con respecto a la victoria ante el Sevilla Atlético: Sergio Pachón por Antonio Moreno. De este modo, jugaron contra el Roquetas Álvaro Campos en la portería, Cifuentes, Álvaro Silva, Pedro Baquero y Raúl López en la zaga, José Miguel Caballero y Moke en el doble pivote, Enrique y López Silva en los extremos, Carlos Caballero de enganche y Pachón como hombre más adelantado.

 Antes de que echara a rodar el balón se guardó un minuto de silencio en memoria del socio número uno del Cádiz Club de Fútbol, fallecido esta semana. La primera jugada de ataque la tuvo el Roquetas, pues, tras sacar de centro, dispuso de una falta lanzada al corazón del área, que tras ser despejada por la zaga cadista, acabó yéndose fuera. Sin embargo, esto fue anecdótico. El Cádiz había salido mejor plantado que su rival, con más hambre, más enchufado. Quizás, al tener más en juego, más necesitado. Rápidamente los amarillos respondieron a la falta roquetera: López Silva metió un buen balón al área de Jonathan, al que no pudo llegar Enrique por poco.

Manolo De Gomar, que ejerció de capitán roquetero, fue de los más activos. Como era esperado, los almeriensen vendieron cara su derrota.Foto: Perico Ortega – www.cadistasfinos.com

 Gol anulado

 A los tres minutos de partido llegó una jugada muy polémica. Enrique asistió, tras ganarle la espalda a su marcador, a Carlos Caballero, que dentro del área y completamente solo, batió a Jonathan. Sin embargo, el colegiado Arias Ortiz (y no su asistente) invalidó la jugada por fuera de juego. Tanto Enrique como Caballero se encontraban en posición reglamentaria.

 El Cádiz, a pesar del tanto anulado, seguía buscando de forma insistente la portería rival. Así, tras un centro desde la derecha, Pachón de cabeza falló por muy poco: el madrileño cruzó en exceso su cabezazo. El Cádiz sólo mostraba signos de debilidad en jugadas a balón parado, con algunas imprecisiones defensivas que los roqueteros no aprovechaban. Los amarillos combinaban dos estilos de juego: uno más rápido, cuando el balón rebasaba la divisoria de los dos campos, buscando atacar por las bandas, con otro más pausado, tocando la bola con calma, cuando la pelota estaba en su propio campo. Todo ello mezclado con una presión asfixiante para el Roquetas, que apenas tenía el cuero.

 López Silva pudo marcar tras recibir un gran pase de Carlos Caballero, que dejó completamente solo al onubense. Sin embargo, su disparo se marchó alto y desviado. A partir del minuto veinte de juego el Roquetas pareció estirarse algo más, empezó a entrar en juego e inquietó al Cádiz. Israel tuvo una gran oportunidad, tras recibir el balón dentro del área y de espaldas a la portería. Marcado por Baquero, el jugador del Roquetas intentó disparar a la media vuelta, pero su lanzamiento se marchó fuera. Poco después fue Beltrán, tras aprovecharse de una imprecisión defensiva del Cádiz, quien metió el miedo en el cuerpo a la parroquia gaditana. Sin embargo, perdió el balón antes de poder disparar.

 Mayor igualdad

Jose González decidió jugarse el todo por el todo. Quitó al amonestado Moke e introdujo a Antonio Moreno. Más madera. Hacía falta.

 Pese a ello, las mejores oportunidades seguían siendo cadistas. Tal vez los amarillos no hilaban el juego con la misma facilidad que en los primeros minutos, tal vez hacían gala de demasiadas imprecisiones en el centro del campo (con pérdidas tontas de la posesión), pero llegaba con peligro a la meta de Jonathan. Así, en el veintisiete Carlos Caballero disparó desde fuera del área, aunque el balón acabó yéndose fuera, rozando el poste de la portería del Roquetas.

 Diez minutos más tarde el propio Caballero gozó de una oportunidad inmejorable para inaugurar el marcador. Tras un saque de banda, recogió un rechace dentro del área roquetera. Completamente solo y con toda la portería para él, su disparo acabó marchándose fuera. A medida que se llegaba al descanso, se veían signos de cansancio en el Cádiz. El Roquetas, por su parte, intentaba meter balones en el área de Álvaro Campos, que eran despejados sin problemas por la defensa. Una vez cumplido el minuto cuarenta y cinco, el colegiado señaló el final del primer tiempo sin haber descontado prácticamente nada.

 Tras la reanudación, el Cádiz realizó el primer cambio del partido: López Silva se marchó sustituido por Fernando Velasco. Este segundo período comenzó más equilibrado, en cuanto a fuerzas, que el primero. El Cádiz, aún así, dispuso de la primera oportunidad clara. Enrique, tras aprovecharse de un error defensivo del Roquetas, quiso meterle un buen balón dentro del área a Pachón. El envío fue demasiado corto, propiciando que llegara Jonathan antes que el delantero cadista. Álvaro Silva, en el saque de esquina posterior, pudo marcar, pero su remate fue demasiado blando, siendo blocado sin problemas por el cancerbero rival.

 En el minuto cincuenta y uno, Gabriel Florit realizó el primer cambio de su equipo: entró Javicho por Beltrán. Con este cambio, De Gomar, pasaba a ser la referencia ofensiva del Roquetas. Empezó a inquietar en cada balón parado el conjunto roquetero. Tanto, que en el minuto cincuenta y cinco Cifuentes tuvo que sacar bajo palos tras un remate en el primer palo.

Campos volvía a encajar un gol en Carranza después devarias semanas a cero.

 Se adelanta el Roquetas

 En el minuto sesenta y tres Moke vio la primera amarilla del encuentro tras hacer una falta táctica sobre De Gomar en el centro del campo. Antes de que se realizara el saque de la falta, llegó el segundo cambio en el Cádiz: Aarón Bueno entró por Enrique. Dos minutos más tarde, también se produjo el segundo cambio en el Roquetas: Raúl entró por Marc. Un cambio de talante defensivo que le salió bien al Roquetas, pues en la siguiente jugada consiguió adelantarse en el marcador. Una falta lejana, sacada por Aitor, fue rematada de cabeza por Robles al fondo de las redes de Álvaro Campos. 0-1, el partido se le complicaba enormemente al Cádiz.

 Acto seguido Jose González decidió jugarse el todo por el todo. Quitó al amonestado Moke e introdujo a Antonio Moreno. Más madera. Hacía falta. También el Roquetas, antes de llegar al setenta y cinco de juego, realizó su último cambio: quitó a Israel y dio entrada a Quique Lorenzo (que fue amonestado nada más salir)

 Remontada

 A un cuarto de hora del final del encuentro el Cádiz consiguió empatar. Pachón recogió el balón dentro del área y, sin pensárselo, disparó a puerta, superando a Jonathan. 1-1. El punto era mejor para los cadistas, que aún así, no se conformaron. Este último cuarto de hora de juego fue de acoso constante hacia la portería del Roquetas. Morillas fue amonestado un minuto después del gol de Pachón tras hacer una fea entrada por la espalda a Caballero.

 Pachón, de cabeza, rondó el segundo. Su remate se marchó por encima del larguero. Carlos Caballero, en una falta lateral, también estuvo cerca de lograrlo: su disparo, sorprendiendo a todo el mundo, impactó en el larguero. Fue Fernando Velasco, a un minuto del final, quien culminara la increíble remontada del Cádiz. Un gol importante, que certificaba una victoria merecida pero sufrida.

 Cuatro minutos descontó el colegiado, en los que Pachón, con un disparo desde fuera del área que dio en un defensor del Roquetas, estuvo a punto de hacer el tercero. El marcador no se movería más. 2-1, victoria del Cádiz. Los amarillos, en función de lo que ocurra mañana, pueden certificar su clasificación matemática para el play-off.