La Copa puede traer malas noticias
El partido de dieciseisavos de final de la Copa del Rey fue muy satisfactorio para el Cádiz. El equipo dio una grata imagen ante un rival superior, llegándolo a dominar por momentos y sin complejo alguno. Sin embargo, tras la disputa de los primeros novena minutos de esta eliminatoria a doble partido, no todo es positivo para el Cádiz.
No hay que olvidar que el partido de Copa del Rey era un premio. Un premio para la afición, para la plantilla, para la entidad. No hay que olvidar que el partido verdaderamente importante para el Cádiz es el del próximo fin de semana en Puertollano, a domicilio. El encuentro de Copa del Rey trae, a la espera de que se realicen las pertinentes pruebas médicas, tres malas noticias.
La lesión de Dieguito. La lesión de David Ferreiro. La lesión de Ikechi Anya. Las tres, producto del esfuerzo del equipo en todo el partido, ante un equipo mucho mejor que contra los que suele jugar el Cádiz en el Grupo IV.
El primero en caer fue Dieguito. El canterano llevaba sin jugar desde la novena jornada, en Roquetas. Se le vio con ganas. Muy motivado, suya fue la primera jugada de peligro del Cádiz, cuando le hizo un fabuloso caño a Rami. Estuvo muy participativo hasta que, en el minuto sesenta y cuatro, se lesionó.
Poco después cayó David Ferreiro. Titular indiscutible, Jose González lo alineó de inicio contra el Valencia. Las mejores acciones del gallego llegaron en la segunda mitad, cuando probó a Guaita con un disparo casi sin ángulo o cuando asistió, tras una buena jugada por la banda, a Yuste. Su lesión, como la de Dieguito, se produjo sola. Muy preocupante esta lesión de cara al duelo contra el Puertollano, pues de causar baja, sería muy sensible para los amarillos.
En la recta final del encuentro se lesionó Ikechi Anya. El escocés mantuvo un duelo durante todo el partido con Barragán, en el que hizo gala de su explosividad y descaro. Como en los casos anteriores, el escocés se lesionó solo. No le quedaban cambios al Cádiz y el extremo cadista tuvo que quedarse sobre el terreno de juego para no dejar a su equipo en inferioridad numérica en los últimos minutos.
Tres lesiones provocadas por la exigencia del partido. Tres bajas sensibles, de confirmarse, para rendirle visita al Puertollano, uno de los mejores locales del Grupo IV.
Autor:Belmonte
