Un Cadiz muy serio y Razak

Muchos, nada más verlo salir, dijeron: ¡Mira, el portero del Betis viene con nosotros: Va de amarillo!. El nigeriano estuvo horrorosoen los dos goles encajados, no así Camposque solventó quizás su mejor tarde como portero del Cádiz.Foto: Manuel Gómez-Diario de Cádiz

Segunda jornada consecutiva viendo puerta. Séptimo gol de la temporada, los mismos que Pachón y el defenestrado Aarón Bueno. Enrique Ortiz mantiene su racha goleadora. Como ya ocurriera la pasada jornada fue el primer jugador del Cádiz en marcar. Esta vez, aprovechó un regalo de Razak para poner la cabeza y marcar. El extremeño, que otra vez jugó en la banda izquierda, rindió a un buen nivel hasta que al poco de empezar la segunda parte fue sustituido por Velasco, que también vio puerta. También lo hizo de cabeza, tras aprovechar otro error de Razak. El portero del filial bético ha sido clave en la victoria del Cádiz: siempre inseguro, fallón y dubitativo. Los dos goles, además de dejar en evidencia al guardameta del Betis B, demuestran que este equipo a balón parado es muy peligroso. Ya logró sacar petróleo la pasada jornada en el gol que dio la victoria ante el Estepona y en este encuentro lo han vuelto a demostrar. Cualquier falta o saque de esquina que toca Juanse Pegalajar es un auténtico peligro. Y si el jiennense no está, Carlos Caballero también se encarga de generar peligro a balón parado. Una falta y un corner. Dos goles. El Cádiz salió desde el primer minuto a por el partido, sin especular. Desde el primer momento se dispuso a encerrar al rival en su campo, recuperando pronto el balón cuando no tenía la posesión y jugando por las bandas. Pachón, Juanse y Enrique buscaron continuamente la asociación. Moke y José Miguel Caballero hicieron un partido muy serio, logrando que no se echara de menos al sancionado Jurado. También se mostró muy segura la zaga, repeliendo las intentonas béticas. El Betis B estuvo prácticamente maniatado durante la primera parte, donde el Cádiz realizó el mayor esfuerzo. En el segundo tiempo, el equipo se dedicó a dosificar esfuerzos y a administrar la renta obtenida, a la espera de dar otro zarpazo. Últimamente están recobrando importancia las bandas en este equipo, algo muy necesario, pues acaba con la previsibilidad en ataque y posibilita aprovechar los remates de Pachón (o de Antonio Moreno cuando esté) De momento, los fijos en los extremos son Enrique y Juanse Pegalajar. El tercero en discordia parecía ser López Silva, aunque esta vez Jose González optó por darle prioridad a Velasco, que salió antes que el onubense. El que se quedó fuera fue Aarón Bueno. El catalán cada vez pierde más enteros: perdió la titularidad a favor de López Silva y, ahora, no entra en las convocatorias. Habrá que ver si se trata de un toque de atención del entrenador o de una pérdida de confianza definitiva. Además de Velasco y López Silva, Diego Reyes también pudo jugar. El chiclanero disputó los minutos finales, cuando entró en sustitución de Pachón. Era la segunda vez que Jose González lo convocaba desde el problema surgido a raíz del mercado de invierno. Reyes llevaba sin jugar desde la decimonovena jornada, cuando el Cádiz cayó contra el Melilla. Jugó poco, minutos sin demasiada importancia y con todo resuelto, pero el hecho de que Jose González lo metiera a él en lugar de Fran Cortés puede ser interpretado como un gesto definitivo para desenterrar el hacha de guerra. Al contrario que Razak, Álvaro Campos se mostró seguro y fiable. El cancerbero consiguió mantener su meta a cero (sexta vez esta temporada que lo consigue) y para ello tuvo que hacer intervenciones de mérito. Providencial fue su parada en el minuto cincuenta y cinco, frustrando la ocasión más clara del Betis B del partido. Era el empate, cantado por prácticamente todo el mundo, pero el valenciano logró meter una mano salvadora para que el Cádiz conservara la ventaja. En definitiva, un gran partido del Cádiz, que no conocía la victoria lejos de Carranza desde la victoria en el coqueto Ciudad de Puertollano. En rueda de prensa, Jose González reconoció sentirse muy orgulloso de sus futbolistas. Motivos no le faltan. El equipo dio una imagen muy positiva, que refrenda lo ya avanzado en el segundo tiempo contra el Estepona. Ahora queda que el equipo dé el mismo rendimiento desde el principio en Carranza.

Autor:Belmonte