El segundo tiempo condena al Cádiz


 cadiz_abraham.jpg
 Abraham hizo el 1-0. Al menos sirvió para sumar un punto.

El Cádiz, que empezó dominando y que falló dos claras ocasiones en el primer tiempo, desapareció en la segunda mitad y permitió que el Rayo Vallecano sacara un punto de Carranza.Un duelo de urgencias se vivía en Carranza. El Cádiz tenía ante sí la urgencia de vencer, dados los resultados de sus rivales por evitar el descenso, si no quería descolgarse definitivamente. Para el Rayo Vallecano conseguir los tres puntos también era urgente y necesario, ya que una derrota comprometía su situación en la clasificación, acercándolo peligrosamente al descenso. Era un partido entre dos clubes hermanados que debían vencer para seguir con vida.Víctor Espárrago, que por una vez pudo trabajar a lo largo de la semana con la gran inmensa mayoría de la plantilla, revolucionó el once inicial y la convocatoria. Tanto Ogbeche, que había superado su lesión aquella misma semana, como el checo Zlámal retornaron a la lista, en detrimento de Milos Bogunovic y de Dani Miguélez. Además, el técnico uruguayo incluyó en el equipo titular a De la Cuesta, Fleurquin y López Silva. Así, el once que jugó contra el Rayo Vallecano estuvo compuesto por Kiko Casilla en la portería, Cifuentes en el lateral diestro, pareja de centrales compuesta por De la Cuesta y Fragoso, Raúl López en el lateral izquierdo, doble pivote formado por Erice y Fleurquin, Enrique y López Silva en las bandas, Abraham de enganche y Toedtli en la punta del ataque. El árbitro de la contienda fue el asturiano Piñeiro Crespo.El Cádiz empezó con menor empuje que en partidos anteriores, intentando dormir el partido, jugando la bola con tranquilidad, mientras el Rayo esperaba agazapado atrás a la espera de pillar desprevenido a su rival. El primer disparo a puerta del partido fue del equipo madrileño, tras un disparo de Piti que obtuvo una buena réplica por parte de Kiko Casilla. La presión rayista en el centro del campo se fue acrecentando, gracias a la labor de Movilla y de Míchel, muy activos en estos primeros minutos. Abraham, marca otra vezDespués de unos minutos muy aburridos, de mucho toque y con los rivales respetándose demasiado, llegó el primer gol del Cádiz en una bonita jugada de ataque. El tanto nació de las botas de López Silva. Un centro del onubense por la banda izquierda le llegó a Enrique, que la puso en el punto de penalti para Toedtli, que en vez de rematar, se la dejó a Abraham, que llegando desde atrás batió por raso a Dani. 1-0 y Carranza era un clamor.El Rayo parecía aletargado y el Cádiz, espoleado por su afición, disfrutaba arrinconando a su rival con largas jugadas de ataque protagonizadas por López Silva, Enrique y Abraham. Muy activo estuvo López Silva, que combinaba con Raúl López y con Abraham, inquietando constantemente a la zaga vallecana. El dominio cadista era tremendo y los jugadores llegaron a protestarle a Piñeiro Crespo un posible penalti sobre Enrique. En la jugada siguiente, después de que Erice cortara un contragolpe del Rayo Vallecano, Enrique estuvo a punto de batir a Dani después de recibir un buen pase de Abraham, pero el cancerbero rayista, cuando estaba prácticamente batido, despejó el balón a corner con la pierna. La realidad era que el Rayo le había entregado la pelota al Cádiz, que acosaba a su rival en busca del segundo gol, que terminara de matar el encuentro. Dani volvió a salvar a los suyos tras despejar un disparo de López Silva a bocajarro. El Cádiz estaba muy bien plantado en todas las líneas, evitando que el Rayo pudiera jugar a gusto, siendo el amo y señor del partido. Tras la reanudación ninguno de los dos equipos registraron cambios con respecto a los jugadores que habían iniciado el partido. Cabe reseñar la amonestación recibida por Fleurquin nada más comenzar el segundo acto por una acción no merecedora de cartulina. El Rayo Vallecano pareció empezar menos frío, y Rubén Castro estuvo cerca de lograr la igualada después de que un disparo suyo se estampara en el poste de la portería de Casilla. Parecía que como le suele pasar al Cádiz en los segundos tiempos, el rival le había comido terreno, puesto que en estos primeros compases la gran inmensa mayoría del juego se desarrolló en el campo cadista, con unos Movilla, Albácar y Piti muy activos. El propio Piti volvió a avisar con un disparo desde fuera del área que paró Casilla. Poco a poco el Rayo ganaba posiciones. cadiz_ormazabal.jpgViendo que podrían expulsar a Fleurquin, Espárrago movió ficha e introdujo a Víctor Ormazábal por el uruguayo, que fue aplaudido por la grada de Carranza, que agradeció el esfuerzo del capitán. También Felipe Miñambres decidió refrescar a su equipo, tras meter a Jofre Mateu por Yuma. El Cádiz jugaba replegado, conteniendo las acometidas de su rival e intentando hacer bueno el gol de Abraham del primer tiempo, mientras en el Rayo cada vez Pachón entraba más en juego. Tanto va el cántaro a la fuente…En una de las acometidas del Rayo Vallecano Toedtli derribó a Pachón al borde del área y en esa falta llegó el empate visitante. Fue un golazo de Edu Albácar de libre directo, ante el que Kiko Casilla no pudo hacer nada. Ciertamente, ese gol se veía venir, visto el bajón del Cádiz desde el comienzo de la segunda parte y la ausencia de Fleurquin. Empezaba un nuevo partido.Espárrago, ante el empate, decidió meter más mordiente en ataque, tras introducir a Diego Tristán por Toedtli y a Ogbeche por López Silva. Se trataba de meter dos delanteros en busca del segundo gol, que se había resistido en el primer tiempo. A pesar de estos cambios, el Rayo seguía dominando la bola y parecía que de llegar un nuevo gol, correría a cargo del equipo madrileño. Desde el banquillo Víctor Espárrago presenciaba el juego de su equipo con cierta desesperación. El Rayo puso cerco a la portería de Casilla, que se mostraba especialmente dubitativo en cada balón por alto que le llegaba. El Cádiz, que atacaba sin demasiada convicción, falló una clara ocasión al borde del descuento, después de un remate de cabeza de Enrique tras un saque de esquina de Abraham. En estos últimos minutos se sucedieron las ocasiones para ambas escuadras, pues tanto Aganzo como Abraham estuvieron muy cerca de marcar, pero el marcador no se movió. El resultado final, de empate, provocó el descontento de la afición. Fue un resultado justo a lo visto en el partido, en el que cada equipo dominó una mitad del encuentro. El Cádiz volvió a evidenciar sus carencias, que sólo tiene gasolina para cuarenta y cinco minutos y con este punto se coloca en la decimonovena posición, empatado a puntos con el Albacete y a cinco de la salvación.

También te podría gustar...