¿Qué le pasa al Real Betis?
 Pepe León parece condenado a tener a Lopera siempre a su sombra. |
Aventurarse en esto del fútbol es muy complicado. Puede que dentro de unas horas el Real Betis haya goleado al Real Madrid en el Trofeo Carranza y que, en unas semanas, sea el líder del campeonato liguero con gran diferencia sobre sus perseguidores. No obstante, hoy por hoy, horas antes de que los béticos inicien su participación en el Trofeo Carranza, cualquier futbolero (excepción hecha de los sevillistas) no puede hacer otra cosa que preocuparse por lo que le ocurre al Real Betis Balompié.
El equipo verdiblanco alcanzó su cenit entre los meses de junio y octubre de 2005. La victoria en la Copa del Rey, la clasificación para la Champions League, la superación de la ronda previa de la competición europea ante el Mónaco y la victoria, el 1 de noviembre, ante el todopoderoso e invencible Chelsea de Robben, Makelele, Lampard y Cech invitaron a todos los béticos a tocar el cielo. Sin embargo, desde aquel día, casi todo ha ido cuesta abajo para los de Heliópolis.
Fueron eliminados de la Champions por los británicos del Chelsea y el Liverpool y de la UEFA por el Steaua de Bucarest. El curso fue empeorándose y acabó fatal, con un equipo excesivamente cerca del descenso para lo que se esperaba de él y con una afición enfrentada a los suyos que supo perdonar en el momento apropiado para evitar el infierno de Segunda al equipo del Ruiz de Lopera. Sin embargo, el curso actual no ha empezado mejor.
 El fichaje de Irureta es una de las mejores noticias para los béticos en los últimos meses. |
Joaquín se quiere ir y Oliveira no quiere volver. Los dos principales estandartes de aquel magnífico año 2005 no quieren seguir en el Betis. Probablemente con una plantilla más compensada los dos astros no dudarían en continuar vestidos de verdiblanco. Pero en la plantilla bética siguen alternándose jugadores de calidad como estos dos, el capitán Juanito, Rivas o Edu con otros que no cumplen los requisitos mínimos del buen profesional, como el caso de Benjamín.
 Joaquin no quiere seguir en el Real Betis. Prefiere al Valencia. |
Al problema futbolístico se une la cuestión de la Junta Directiva. El histriónico personaje de Manuel Ruiz de Lopera había eclipsado a todo el entorno bético. Era un señor capaz de suscitar amores y odios entre rivales y afines. Su abandono a medias supone un lastre demasiado fuerte para el nuevo presidente que parece condenado a padecer tortícolis por mirar continuamente a su antecesor.
Mientras, los refuerzos no llegan, las estrellas se van y el Real Betis, el únic equipo andaluz que ha jugado la Champions, parece navegar por unas aguas turbulentas más propias del océano profundo que de su Guadalquivir.
Sólo dos noticias para la esperanza: un buen entrenador, como Jabo Irureta, que garantiza trabajo y discreción ante los problemas y una excelente afición, probablemente una de las que sigue más de cerca a la afición cadista en el honorífico título de la mejor hinchada de España.
Autor:JG del Valle
