Poulsen y Dos Santos ¿Diferentes?

Villareal y Cádiz. Un caso parecido con final muy distinto.

No cabe duda que el llamado Submarino amarillo, para nosotros los otros, pisan fuerte en el panorama europeo. A un paso de dejar en la cuneta a todo un Inter y de seguir haciendo historia, siguen en su afán de seguir codeándose con los mejores por muchos años. Ya tienen cerrado el fichaje del turco txuri-urdin Nihat, y ahora parece que van a por Robert Pires, el habil interior francés que juega en los gunners de Londres. Pero a pesar de los aires de grandeza del club castellonense -no sólo de dinero vive el hombre-, detrás hay un trabajo concienzudo y bien hecho. Para muestra un botón que, quien sabe – ¡eso sí serían paradojas del destino!- podría tener al Cádiz como espejo… espejo en el que no mirarse. Hablamos de Christian Poulsen, jugador danés que juega en Shalke 04 alemán, y de Julio Dos Santos. Los dos son jóvenes y talentosos. Ambos han dejado colgados a los amarillos para fichar por dos grandes de Europa, por el Milán el primero y por el Bayern el ex jugador del Cerro. En los dos casos han influido notoriamente las condiciones económicas de los transantláticos europeos, cuyas condiciones económicas no podían ni siquiera compararse. Eso sí, y esto es donde el Villareal demuestra el saber hacer las cosas bien va a recibir de Christian Poulsen, una indemnización de 850.000 euros por romper el contrato que le unía al club de Castellón a partir de junio. Por lo pronto van a intentar que Tacchinardi, cedido por la Juve, continúe en la disciplina castellonense. En el Cádiz, y según lo declarado por el Presi Muñoz durante la presentación del Tano Vella, el asunto aún se está estudiando, sin que el club haya decidido aún si va a reclamar o no indemnización, a pesar de lo dicho en su momento sobre el valor jurídico del documento firmado por el club porteño aceptando las condiciones del Cádiz. Enlaces relacionados: – Dos Santos se examina en Suiza sin saberlo. – Sin prisas con Dos Santos – Dos Santos, el culebrón se acaba (… o eso parecía en noviembre del año pasado)