Fiesta aplazada

La fuente sigue en las Puertas de Tierra. La camiseta “ilegal” de Kelme sigue en los almacenes. El autobús descapotable, la chirigota de Manolito Santander, el speaker Javi Lacave, las sorpresas, el discurso de Antonio Muñoz, todo tendrá que esperar una semana más por culpa del Celta… porque esta vez el Cádiz cumplió con sus deberes.El Terrasa llegaba a Carranza en el peor momento posible: con la soga al cuello y como convidado de piedra a lo que se suponía la noche del ascenso, pero los rojillos no regalaron nada. Salió el Cádiz muy concentrado y con las ideas bien claras. El Terrasa tocaba el balón pero el Cádiz robaba y salía rápido aprovechando las debilidades defensivas de los egarenses. Enrique creaba peligro superando una y otra vez a Héctor mientras que Pavoni y Sesma se turnaban en superar a Christian. La primera oportunidad fue para Fleurquín que mandó su disparo a las nubes tras jugadón de Enrique. Pero la más clara fue para De Quintana a la salida de un corner aunque el portero catalán respondió con un auténtico paradón. La jugada se repetiría pocos minutos después pero esta vez De Quintana logró alojar el balón en la red de Carranza.El gol ocultó la brillantez cadista. El Cádiz cedió el dominio a los visitantes con la tranquilidad de no verse angustiado pero pronto las cosas cambiaron y Armando, acertadísimo en todo lo que hizo, respondió con una mano impresionante al remata de cabeza de Maikel. El descanso no sirvió para mejorar las cosas sino todo lo contrario. El Terrasa se permitió tocar más aún la pelota y el Cádiz cada vez defendía más cerca de Armando. David avisó con una internada por la derecha que sólo Armando pudo evitar que fuera gol.

De Quintana, abrió la lata

Sesma, su gol más importante

Los de Terrasa tuvieron que esperar a un grave error de Suárez que cedió un mal balón a Armando Maikel lo peleó con el guardameta cadista que sólo pudo despejarla con los puños con tan mala fortuna que el balón cayó en los pies de Abraham quien lo convirtió en gol, tras pasar primero por el poste de la portería de Armando. Si el Cádiz estaba tocado antes del gol, tras el empate la tocada fue la afición. Por más que tratara de aplaudir y animar, el miedo iba por dentro y la sombra de la decepción se ceñía sobre Carranza. Fueron los minutos más largos de la temporada y duraron hasta que apareció Manolo Pérez.

Manolo, dio la tranquilidad con el 3-1

El centro del campo cadista necesitaba un recambio y el 23 del Cádiz le dio otro aire al encuentro creando mucho peligro, sobre todo, en dos jugadas a balón parado. Pero tuvo que ser Pavoni quien aprovechara un balón en profundidad para ceder a Jonathan Sesma. El canario anticipándose a Christian hizo el dos a uno que dio tranquilidad a los amarillos. El Terrasa acusó en demasía el golpe. La Segunda B era un fantasma muy cercano para los catalanes que perdieron los papeles y acabaron con nueve. Primero fue Rubén López quien hizo una entrada peligrosísima a Pavoni y acabó en la ducha antes de tiempo. Después fue Rodri quien cometió el penalti más claro que se haya visto en un campo de fútbol ante una internada de Enrique. Rodri acabó también en el vestuario y el penalti lo transformó Manolo Pérez en el tranquilizador 3 a 1.En ese momento sólo quedaban los transistores porque el partido estaba sentenciado. Los catalanes trataron de salvar los diez minutos que quedaban con cierta dignidad y el Cádiz no quiso hurgar en la herida de un equipo descendido. Las noticias que llegaban por la radio no eran demasiado buenas. El Eibar vencía en Balaídos y el Recre en el Colombino. Ya con el partido acabado y el Carranza medio vacío se produjo una noticia que simplifica el futuro amarillo. Lozano hacía el gol del empate del Almería en Huelva y el Cádiz eliminaba un rival para el ascenso.Quedan dos plazas, (la del Alavés, jugando en Elche, estaba más que dada) y hay tres equipos. El Cádiz tratara de repetir lo del Levante del año pasado: subir en Chapín y como líder. ¿Será posible? El champán sigue enfriándose. por Ccapital

Autor:Ccapital