El Cádiz encuentra un atajo para la victoria.
Armando salva el cuello de su excompañero Oli.Ya puede firmar Lotina por la selección… o por el Racing. Ya pueden algunos repetir que Oli era mejor entrenador que su antecesor. Ya pueden dejar tranquilos a los jugadores y sus salidas. Ya pueden olvidar las disputas dentro del vestuario. Ya pueden calcular cuántos equipos ascendieron llevando diez puntos en siete jornadas. Ya pueden dejar las quinielas los que buscaban entrenador…, al menos durante una semana. Pese a que la Junta Directiva cadista nos obsequió por la mañana con una nota de ratificación del técnico ovetense, la auténtica ratificación le ha llegado por el resultado al arrancar el Cádiz una valiosísima victoria en el José Rico Pérez de Alicante.
En días como éste la imagen puede ser lo de menos. Realmente, la del Cádiz ha quedado salvada por la victoria porque el Hércules ha sido superior a los amarillos durante todo el partido, excepto en el marcador. Las ocasiones en las botas de los futbolistas alicantinos se han sucedido a lo largo del partido y sólo la fantástica actuación de Armando ha evitado la victoria de los herculinos.
Oli apostó por otro nuevo equipo colocando a César de lateral derecho, dejando en el banquillo a Bezares y a Medina y recuperando a los antes defenestrados Sergio Rodríguez y Miguel. El equipo no era ni mejor ni peor que el de otros días, sólo distinto. Pero esta vez salió bien, aunque al principio nada hacía pensar así.
Los alicantinos también se jugaban mucho en el encuentro. La cabeza de Bordalás pendía de un hilo y sólo una victoria podría haberlo salvado. Por eso sus jugadores salieron muy metidos y comenzaron disponiendo de ocasiones, sobre todo en las botas de Moisés. Quique Mateo superaba a la defensa amarilla, Piti se movía entre líneas y Moisés recogía los centros.
Sin embargo, Armando comenzó con su recital en estos primeros minutos. El Cádiz apenas contaba con ocasiones y sólo trataba de aprovechar el desacierto de Farinós y Turiel en el centro del campo.
Curiosamente, cuando el Cádiz lo pasaba mal, un pase de Miguel a Sesma lo aprovechó éste para darle un gol hecho a Óscar de Paula que no perdonó. Cero a uno y la autoestima amarilla parecía recuperarse. Al gol le siguieron los mejores minutos amarillos pero Bordalás reaccionó y colocó a Montenegro por Farinós. El ofensivo cambio permitió a los alicantinos recuperar el control del encuentro y volver a poner a Armando en problemas.
En la segunda parte más de lo mismo. El Hércules con el balón tratando de crear peligro, y consiguiéndolo, y el Cádiz resistiendo como buenamente podía. La figura de Armando se agrandaba para tras parada y en ataque el Cádiz seguía desaparecido. Para colmo, en el minuto 80 Fleurquin era expulsado y el Cádiz tenía que resistir con diez. La última oportunidad la tuvo Piti en el único fallo de Armando en todo el encuentro pero por suerte para los amarillos el balón no entró.
El Cádiz acaba su gira levantina eliminado de la Copa del Rey pero con tres puntos más en liga. Realmente, esta victoria no se sabe si prolonga la crisis o Alicante en 2006 será como Almería del 2004. Lo que está claro es que el Cádiz tiene tres puntos más y que Oli sigue otra semana: todos hemos ganado y por mucho que quiera algún personaje nacido en Algeciras esta victoria nadie nos la puede tirar a la cara.
Autor:JG del Valle
