Canal Sur y su neutralidad con los suyos
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| Aficionados malacitanos en Carranza. Nada de incidentes entre aficiones. Hubo agresión de una parte reducida de los aficionados malagueños a los seguidores cadistasFoto: cadistasfinos.com |
La equidistancia no sirve ante la violencia en el fútbol. Si queremos erradicar la violencia de los terrenos de juego resulta fundamental denunciar a aquellos que son culpables de los actos violentos dentro del terreno de juego. Por eso es absurda la posición de equidistancia que mantuvo ayer Canal Sur Televisión.Cualquiera que no hubiera estado presente en el encuentro que enfrentó al Cádiz con el Málaga y viera los reportajes que emitió Canal Sur Televisión en sus dos cadenas pensaría que hubo un duro enfrentamiento entre la afición gaditana y malagueña. La imagen de parte de la grada amarilla sobre el terreno de juego y los comentarios que acompañaban las imágenes se mantenían en la ya consabida equidistancia que tanto gusta en los estudios de Canal Sur.Ya se sabe que cuando Canal Sur emite los reportajes sobre la mayoría de equipos andaluces su posición es eminentemente favorable al equipo andaluz. La posición adoptada cuando Javi Navarro mandó al hospital a Juan Arango fue paradigmática en la línea habitual de endogamia que mantiene la tele andaluza.La endogamia tiende a convertirse en equidistancia cuando se trata de encuentros encuentros entre equipos andaluces. Canal Sur trata de mantenerse en la delgada línea que permita no ser criticado ni por una afición ni por otra. Se sabe que es una necesidad para una televisión autonómica que los espectadores de las distintas zonas de Andalucía no se consideren perjudicados por los comentarios de los profesionales del medio.
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| Antes de comenzar el choque, un nutrido grupo de seguidores cadistas de la supletoria de Fondo Norte saltaron al terreno de juego para huir de los objetos |
Esto suele ser muy común en penaltis dudosos, en arbitrajes regulares, en jugadas discutibles,… Pero no puede servir para los actos de violencia. La violencia suele tener un responsable y una víctima e igual que nadie comprendería que en informativos se culpabilizase de un asesinato a quien no lleva puesto el chaleco antibalas, en deportes no se puede permitir que se ignoren los hechos para mantener la equidistancia.Más de un centenar de aficionados malagueños visitaron este domingo Carranza para acompañar a su equipo. De estos, un grupo, prácticamente la mitad, se comportó de un modo excepcional, apoyó a su equipo, pidió a su entrenador que sacara a Sandro y Popo, gritó ¡uy! con los remates de Jonathan Valle y, al final, salió muy decepcionada por el gol de Lucas Lobos. A éstos la afición amarilla le cantó, al finalizar el encuentro: Esto sí que es una afición.Sin embargo, con ellos vinieron otros, los indeseables. Unos tipejos que antes de comenzar el encuentro comenzaron a tirar botellas de agua llenas y piedras sobre los aficionados cadistas del Fondo Norte. Esta fue la única violencia y el único incidente que hubo en Carranza. La agresión, por parte de un sector de la afición malagueña, a unos aficionados cadistas. Y eso debería haber sido lo que Canal Sur hubiera dicho cuando, en las imágenes se veía a una chica cruzar el césped con las manos en la cara. Nada de incidentes entre aficiones. Hubo agresión de una parte de los aficionados malagueños a los seguidores cadistas. Esos aficionados radicales preferiríamos que no volvieran a Carranza. Los otros, los que se comportaron como caballeros, están invitados el año próximo a venir a Carranza, ojalá en Primera.
Autor:JG del Valle
