Toro Acuña vs Dépor. El despido puede llegar al fútbol español

Caso Acuña dejará precedenteania_acuna.jpgDe la imagen de la derecha no hace mucho. Corresponde al antepenúltimo partido de liga del Cádiz C.F en Carranza. El Dépor de Joaquín Caparrós, en un día en que cayó un diluvio en el estadio cadista, dejó en Cádiz gran parte de sus aspiraciones de alcanzar la UEFA y al equipo amarillo metido en la UCI. Puede que aquel fuera el último en que Roberto “Toro” Acuña se enfundaba la zamarra blanquiazul.Ahora el paraguayo vive un conflicto con su club que va a acabar en la sede del Juzgado de lo Social de la capital coruñesa. Si hace unos días escribíamos que la sentencia del “caso Zubiaurre” puede suponer un antes y un después en la formación de los futbolistas y en la forma de gestionar las secciones inferiores, la decisión final que resulte del “caso Acuña” puede revolucionar el fútbol español.Lendoiro quiere despedirlo por «ineptitud sobrevenida», lo que rebajaría la indemnización que debe pagar al jugador respecto a la que correspondería a un despido ordinario. Los jurídicos deportivistas se basan en el Estatuto de los trabajadores que recoge los «despidos por causa objetiva», a la vez que no esconden el deterioro físico del jugador paraguayo «no rinde al nivel para el que se le paga y se le contrató, tampoco le quiere ningún club de primera ni de segunda división».Si el juzgado de lo Social da la razón al Dépor, “sólo” tendría que indemnizar al futbolista a razón de 20 días por año trabajado, en lugar de los 60 días por año trabajado que le corresponderían si el despido fuese catalogado como improcedente.Acuña por su parte se defiende a través de su abogado, mientras no oculta el daño que le están haciendo según sus palabras: «Es una vergüenza, porque lo que más me duele no es que me intenten quitar el dinero que me corresponde por contrato, sino que digan que no estoy capacitado para jugar al fútbol. ¿Quiénes son ellos para decir eso?», afirma el futbolista.Aunque el asunto ya no tiene vuelta atrás, y parece enquistado, estuvo a punto de resolverse este verano. El ex jugador del Zaragoza que reclama al Dépor una serie de atrasos, la ficha de esta temporada así como el contrato de imagen, aceptó perdonar el 30 % y cobrar el 70% de lo firmado. Todo parecía arreglado, hasta que Acuña se enteró que tendría que esperar tres años para cobrar todo. Acuña se plantó y denunció al Dépor, que acto seguido lo ha despedido por una supuesta «ineptitud sobrevenida». Al final será la Justicia quien ponga las cosas en su sitio. Estaremos al tanto…Los cimientos del fútbol pueden desmoronarse… ¿aún más…?

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