DEP Preciado: Ya no entrenará al Cádiz

Un guiño a las estrellas. Lo es. Mayo de 2006. El Cadiz hace escasos dias que ha consumado el descenso en Getafe. La afición ha quedado contenta por la temporada, no así por bajar de nuevo de categoría, pero existe ambiente de fútbol. Ganas de volver. Lo merecemos. ¿Quién será el entrenador? Prácticamente se daba por segura ya la decisión de Muñoz de no confiar en Víctor Espárrago el proyecto del retorno…

Esta es la génesis de este escrito. Eran mis dos candidatos por entonces para coger los bártulos del submarino amarillo. Desgraciadamente, y hace ya algún tiempo bien que lo lamenté, Antonio Muñoz Vera, Alberto Benito, el entorno, o quién fuera… no me hizo caso. Daba dos nombres sin nombrarlo. Era una especie de juego, de adivinanza. Nunca dije publicamente quienes estaban detrás de aquellos dos candidatos que me hubiera gustado entrenaran a mi equipo. Ahora, que ya es tarde lo puedo decir. Uno, Abel Resino, el otro Manolo Preciado, de Astillero, DEP.

Documento de archivo de la Revista Digital Cadistasfinos – (c) Cadistas Finos 2002-2012Publicado originalmente el Mié 24-5-2006

Mis dos candidatos para entrenar al Cádiz	Mié 24-5-2006
por B.Tiner

A uno épocas como esta me distraen mucho. Se llega a casa, una vez comprada la prensa local y alguna deportiva, y te sientas en el sofá  (o donde puedas y te dejen), a ver que nombre nuevo aparece para dirigir la nave cadista. Es algo nos preocupa, ahora que el viejo capitán Espárrago haya sido prejubilado por el armador Muñoz.

Y digo me distrae porque lo que uno lee te hace sonreir. Los cuarentones sabemos que antes era igual, e intuíamos que el Diario, principalmente, tenía mucho peso a la hora de ponerle un nombre al jefe del banquillo amarillo. Aquí las cosas no han cambiado con los años. Todos tienen su candidato, su preferido. Cierto es que uno con más recato que otros, pero todos presionan al Presi para que no se deje influenciar por los otros medios. Que si Prysa tiene el suyo, que si a la Nuestra no le toca Hasta Vocento, con dos altavoces en Cádiz, se ha apuntado en la lista para ayudar en la decisión. No es ninguna crítica velada a nadie. Ni mucho menos. Lo que el club busca es un entrenador de fútbol que cumpla el objetivo marcado. Una decisión comprometida, pero a la vez imposible que la construyamos en un astillero entre todos los cadistas. Tampoco se trata de unas oposiciones a letrado de la Seguridad Social y, por tanto, no está sujeta a convocatoria pública la selección del candidato. Es un proceso de concurrencia competitiva, pero no vamos a exigirle transparencia ni cumplimiento de principios de publicidad, mérito y capacidad. Hace bien el Presi en pedir consejo a los hombres de fútbol que considere. Al final será él quien tenga la última palabra. Como siempre.¿Mis dos candidatos para entrenar al Cádiz? No me he olvidado de ellos. En los tres párrafos anteriores van escondidos. Búsquenlos.