Juanse destacó ante la mirada de Jose

cad_rsdalc_03.jpgEl extremo Juanse fue quizás el que mejor aprovechó la oportunidad ante la RSD Alcalá. Lo hizo ante la atenta  mirada de su entrenador.Foto. Ortega –cadistasfinos.com

Entró en el minuto cincuenta y tres, por Pedro Barrancos. Juanse Pegalajar debutaba esta temporada en competición oficial contra la RSD Alcalá, en Copa del Rey. Un futbolista que la pasada campaña había sido fundamental pero que, en esta, ni siquiera había sido convocado para los primeros partidos de Liga.

Con treinta y siete minutos por delante, el jiennense tenía la misión de ayudar al equipo a superar al conjunto madrileño, que se había adelantado en el marcador y había estampado varios balones en los postes. El partido, además, se complicó más aún para el Cádiz después de que se produjeran las lesiones de José Serrano y de Wilfried Moke. Jose González se vio obligado a agotar todos sus cambios antes de tiempo y el equipo lo acusó. Se vio inmerso en la confusión, yendo a remolque de un Alcalá que cada vez creía más en sus posibilidades.

Con el gol de Dioni, tras la expulsión de Baquero, pareció esclarecerse la situación. Y aún quedó tiempo para que Juanse se luciera. Primero, tras robarle la cartera a un defensor rojillo, pisó área y fue derribado dentro de la misma. El veredicto de López López, penalti. Primera pena máxima que le señalan al Cádiz este año a su favor, después de los tres en contra que pitó Benjumea en Jaén.

Desde los once metros, Juanse, tras tirar de picardía para forzar el penalti, tiró de genialidad. Tomó carrerilla y en lugar de tirarlo fuerte, o a un lado, lo hizo con sutileza, al centro. Como Panenka. Una bella transformación que ponía fin a un mal partido del Cádiz. 3-1.

Era el segundo gol de Juanse con la camiseta del Cádiz desde que llegara al equipo en el pasado mercado invernal. El anterior, ante el Poli Ejido y en Liga, también fue de penalti. A pesar del difícil comienzo de temporada, Juanse dio contra el Alcalá un golpe sobre la mesa, demostrando que el técnico puede confiar en él.

 

Autor:Belmonte

También te podría gustar...