El Melilla cae con contundencia por la vía rápida

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 El gol de Josete. Es el defensa con más acierto cara al gol de la plantilla. cad_mel_12.JPGAiram marcaba así el segundo. A puerta vacía tras pase de VillarY abajo, el quinto, de Kike Lópezcad_mel_09.JPG

El Cádiz le ha cogido gusto a marcar pronto en Carranza y a los ocho minutos ganaba uno a cero. Un tanto de los de antes, en un saque de esquina botado por Jorge Luque al corazón del área pequeña. El balón, que rebasó a los hombres situados en el primer palo fue cabeceado a gol por Josete, más listo que Chota y el portero Munar, al que se adelantó. Error o acierto, el caso es que fue una prueba inequivoca de lo que venía después, un Cádiz mucho más certero cara al gol que un cuadro melillense que apostó por un bloque lleno de oficio.

Formaba de inicio el Cádiz con lo esperado. Entre ello el debú en Carranza de Jorge López. El centrocampista riojano, inicialmente anclado en el sistema como teórico interior zurdo, fue de menos a más, y eso que su condición física no es la más adecuada tras su inactividad. Mucho mejor en el segundo tiempo, sobre todo cuando Agné lo cambiaba de banda y le daba libertad tras la salida al campo de Migue García por Airam Cabrera.

Pero volviendo al encuentro, a los veinte minutos el Cádiz hacía el segundo. Lo hacía Airam, en una jugada donde se evidenció para lo que Agné quiere a Jorge López, como lanzador de los dos puntos. Una acción digna de otra categoría y en la que Villar regaló el gol a su mejor aliado. A partir de este tanto, una ligera relajación del equipo se fue viendo cada vez más palpable, tanto es así que a nadie extraño cuando el canario Juan Luis Pulido decretara penalti en un lance en que Andrés saltaba encima de David Vázquez, el 10 melillense. Penalti tan tonto como innecesario que el propio delantero melillense marcaba engañando a Aragoneses. Quedaban siete minutos para el descanso pero nadie entonces veía que el triunfo fuera a lograrse de la forma en que se produjo tras el descanso, donde de nuevo el prolongado idilio del Cádiz con el gol casero hizo que diez mintuos después, el marcador ya señalara un contundente cuatro a uno. El tercero obra de Jorge López que de una estilizada volea con su pierna izquierda y desde justo el borde del área, lanzaba con fuerza un disparo que tras tocar en el cuerpo de Pedro Bolaños cambiaba la dirección y despistaba al portero melillense. El cuarto, otra vez tras un saque de esquina de Luque que tras varios rechaces llegaba a Villar. El onubense, en línea, y salvando el fuero de juego por milímetros disparaba con rapidez al poste izquierdo de Munir.

Un par de minutos después, y si faltaba algo para la sentencia, fue otra vez Villar el protagonista tras recibir una patada alevosa de Bolaños que veía la roja directa. Con diez hombres, Luque salvaba con su cuerpo la mejor acción atacante visitante entre Guille Roldán y Nacho Aznar con disparo final de este. Con el 4-1, y el encuentro resultante, Agné mandaba a la ducha a dos de sus hombres más claves en estos momentos de la competición, Martins y Cabrera. Tras el quinto gol, logrado por Kike López en el setenta y uno, era el propio delantero salmantino el que dejaba su lugar a Dioni. Para entonces, ya todos pensaban en Almería y en seguir la racha.

 

 

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