El Cádiz se inmola en Jaén.

Como en imagen, el juego dividido fue siempre para el R.Jaén.

Tercera derrota consecutiva la del Cádiz CF. Esta vez, después de perder con Roquetas y Melilla, fue el Real Jaén el que sacó los puntos a los amarillos. Pero no sólo le sacó los puntos. También los colores. El segundo tiempo del equipo amarillo fue horroroso. Superado de principio a fin por un combativo equipo local con dos sub20 casi recién debutantes como epicentro del terremoto que hizo tambalear al equipo de Jose tras los primeros cuarenta cinco minutos. Y eso que el primer tiempo no acabó nada mal. Ganaba el Cádiz 0-1 merced a un rápida contra iniciada en un robo de balón de Serrano al borde del área de Alvaro Campos. López Silva dio el certero pase decisivo entre líneas a Fernando Velasco y el malagueño no perdonó la clara ocasión, la más diáfana de todo el partido. A partir del tanto visitantle el Cádiz vivió sus mejores momentos, más por los nervios e imprecisiones locales que por su atino. Eso sí, tanto Baquero como Serrano y especialmente Cifu marcaron la raya defensiva muy alejada del área de meta de Campos. El Jaén buscaba continuamente la banda izquierda defendida por Raúl López, que defendía al joven ídolo local, Iván.Nada hacía presagiar lo que iba a pasar tras el descanso. Fue valiente Manolo Herrero que dejó en la caseta a Angel Martinez, retrasando al lateral al gaditano Zurdo. En su lugar el juvenil Fran Carnicer, que se pegó a la izquierda. Dos extremos muy abiertos (Ivan y Carnicer) junto a tres hombres que percutían por el centro, Diego Segura, Añete y muy pronto el granadino Fran Machado que relevó a un desacertado Zarandona. El Jaén, su entrenador, fue a por todas. No tenía un delantero centro de referencia pero tenía lo más importante, hambre de gol y el balón, que siempre estaba en zona de tres cuartos locales. Velasco en el momento de fusilar a un inseguro Adrián. El Cádiz no tiro a puerta más en todo el partido.

Velasco celebra el 0-1. El Cádiz se inmolo tras el descanso.Fotos: Gina González.

El Cádiz no concedía claras ocasiones de gol, pero el partido poco a poco se fue destiñendo del color amarillo para volverse totalmente blanco. Josemi y Jurado, ambos con tarjeta, no podían mantener la columna del equipo. El Cádiz no robaba y el empate se veía venir podía llegar en cualquier momento. No era fácil adivinar que seguramente llegara a balón parado y así fue. Justo poco después de que Pachón dejara su sitio a Alvaro Silva, e instantes después de que Velasco hiciera lo propio con Hugo García, fue el espigado central y capitán Espín el que remató de cabeza un saque de esquina botado desde la izquierda de Campos. Era el 1-1 y la confirmación de que el Real Jaén que estaba desarbolando al Cádiz en juego encontraba recompensa en el marcador. Hasta ese momento el equipo lo había confiado todo a la pérdida de tiempo y a la falta de punch del ataque local. El Real Jaén se creció todavía más y fue a por el triunfo de forma descarada. Asfixiante presión desde la zaga y mucha briega, todo lo contrario que el Cádiz. Así estaba el encuentro cuando un centro desde la derecha de Campos sin aparente peligro es cabeceado a la red, otra vez, por el hoy bigoleador Espín.Que el partido acabara con Alvaro Campos subiendo a rematar un saque de esquina visitante fue una anécdota de un mal sueño. Difícilmente se puede jugar peor en un campo de fútbol. El segundo tiempo del Cádiz ha sido de pena y la derrota, más que justa.