Un Espanyol de apellidos españoles

logo_small_new.gifSanchez, García, González, Morales… Tamudoespanyol_tamudo.jpg Lejos quedó el debate originado en el post franquismo sobre el cambio de denominación del Real Club Deportivo Español de Barcelona. Al final, no sabemos si por influencia del seny catalán, primó la lógica y se mantuvo el nombre del club fundado en el 1900. Como único guiño catalanista, si se cambió la nomenclatura de la Ñ española por la NY catalana. Pese a la orientación catalanista que sin duda tiene el cambio de denominación del club, en la práctica, la cantera espanyolista tiene una seña de identidad propia. Es la cantera natural de los emigrantes, de los apellidos “españoles”, o castellanos. Y no le ha ido nada mal a los periquitos, con varios títulos en las categorías juveniles y una muy buena hornada de futbolistas que se han formado allí. En el Cádiz tenemos dos: Pérez (Manolo) y Bertrán (Marc), quizás como señal inequívoca de la procedencia de ambos. El primero, hijo de cordobeses, el segundo, apellido catalán. No obstante, los apellidos castellanos proliferan desde hace unos años en las plantillas espanyolistas. En la 2005-2006 no faltan tampoco: Están Sánchez (Sergio), García (David), Hurtado (Moisés), Morales (Angel), Jarque González (Daniel), Lopo García (Alberto) o Soriano (Jonathan)… nada que ver con los Xavi, Carles, Gabri, Sergi, Damiá, Oleguer de su máximo antagonista deportivo, el F.C.Barcelona.espanyol_tamudo2.jpgNo es casualidad esta tendencia que de unos años para acá se viene observando en las canteras de los dos mejores clubes catalanes. Y para demostrar que no es fruto del azar esta tendencia “natural” de la cantera perica a acoger apellidos castellanos, está el paradigma de la cantera espanyolista del último lustro. De apellidos, Tamudo Montero. De nombre, Raúl. Sus padres se vinieron de Extremadura hace muchísimo tiempo, antes de verlo nacer en Santa Coloma de Gramanet. El caso de Tamudo es el típico del hijo de emigrantes en Catalunya. En una reciente entrevista le preguntaban por su listeza a la hora de andar en el área. ¿Dónde aprendió a jugar? «En la calle. Yo vivía en un barrio pequeñito de Santa Coloma y siempre bajaba con mi hermano. Había dos persianas de chapa y ésa era la portería. O los bajos de los coches. Cuando pasaban, parabas. Pero después seguías. Los vecinos acabaron cansados de mi hermano y de mí. Era una calle normal, ya asfaltada. Como no tenía la posibilidad de jugar en otro sitio, lo hacíamos allí. Supongo que eso de evitar los coches, de andar vivo, ayuda». ¿Antecedentes familiares? “Mi padre siempre ha trabajado en lo que ha podido, en lo que le ha salido. Mi madre estuvo en una empresa de interruptores de la luz hasta hace poquito” Un tipo listo este Tamudo. Después de marcar 78 goles en 194 partidos en seis cursos en Primera nadie le discute el título de más listo de la plantilla espanyolista. Habrá que tener cuidado con él.

También te podría gustar...