El Cádiz CF sufrió su tercera expulsión de la temporada
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El Cádiz CF se vio obligado a jugar en inferioridad numérica durante gran parte del duelo que le enfrentó con el CD Tenerife, en la décima jornada de competición en Segunda División. Un duelo en el Heliodoro Rodríguez López que se saldó con reparto de puntos, tras el 1-1 final. A pesar de jugar con un hombre menos sobre el terreno de juego desde el minuto 42, el Submarino Amarillo fue capaz de rescatar un punto de su visita al feudo tinerfeño. Fue el primer encuentro de la temporada en la que el cuadro gaditano no cayó derrotado tras sufrir una expulsión.
El primer duelo en el que el Cádiz CF sufrió una expulsión esta campaña fue en la jornada 3, ante el CD Mirandés en Anduva. Un duelo en el que los amarillos acabaron perdiendo por 3-2, pese a comenzar mandando en el marcador por 0-2. Gran parte de la culpa de esta circunstancia la tuvo la polémica expulsión que sufrió Gorka Santamaría en el primer período. El colegiado del encuentro, Ais Reig, mostró dos amarillas al atacante cadista: la primera en el minuto 32, por “retrasar la puesta en juego del balón con ánimo de perder tiempo, haciendo caso omiso de mis instrucciones”; la segunda, en el minuto 35, por “sujetar a un adversario, derribándole e impidiendo su avance en la disputa del balón”.
Los amarillos no volvieron a sufrir una expulsión en el campeonato liguero hasta la séptima jornada, en la visita del Real Oviedo a Carranza. Un duelo en el que el Cádiz CF cayó derrotado por 0-2 y en el que el expulsado fue Edy Silvestre. El canario Pulido Santana expulsó al mediocampista en el minuto 82, por “entrar a un adversario con el pie en forma de plancha con uso de fuerza excesiva impactando en el adversario”. Una sanción que, finalmente, acabó siendo revocada.
Ahora, en la décima jornada del campeonato liguero, el tercer jugador expulsado en las filas del Cádiz CF ha sido Alfredo Ortuño. El artillero cadista, máximo goleador del equipo este curso, fue expulsado por Pizarro Gómez poco antes del descanso. Así, en el minuto 42, el colegiado murciano mostró la roja directa al atacante, por “realizar una entrada a un contrario, con el uso de fuerza excesiva, estando el balón en disputa”. Una expulsión a la que el equipo logró sobreponerse, consiguiendo salvar un punto en el feudo del CD Tenerife.
