Memoria histórica de los Betis Cádiz


bet_cad_02.jpgMemoria histórica de los Betis-Cádiz. Es lo que nos cuenta JR.
 

Hoy cuando acuda al Estadio del Real Betis Balompié, la memoria histórica me transportara en un túnel del tiempo a 31 años atrás, y me veré en la tersa piel de un chaval que acudía en una cálida noche de sábado, el año de Fiebre del Sábado Noche, a ver por primera vez en su vida un partido de Primera División, y tal primera vez estaba reservada a su equipo de siempre. Aquella noche de sábado de un mes de Septiembre de 1977, contare que España estaba viviendo los primeros pasos de un primer gobierno democrático elegido 100 días antes, tras 40 años sin el, y el Cádiz caminaba por primera vez en Primera tras 67 años.Un Cádiz que había empezado en Primera ganando su primer partido en Carranza con dos goles del homenajeado Villalba con la ayuda de nuestro viejo conocido viento de levante que no quiso perderse tan histórico debut, imponiéndose a un, también ,novato en la categoría como era el Rayo Vallecano de Landaburu, Felines, Rial y compañía, que luego realizo una magnifica campaña considerándose el primer “matagigantes” así considerado, y aportando jugadores a la selección española que, menos de un año mas tarde, regresaría en Argentina’78 a las interrumpidas citas mundialistas.n_betis_los_jugadores-5056.jpgAquel partido del Betis-Cádiz, fue un partido extraño, propio de esos fenómenos extraños Polstergeist, tan poco extraños en estos lares del rincón de la rinconera, como gusta llamarlo a José Landi. Un partido en el que asistí desde el Gol Sur, no al penalti mas largo del mundo, sino al descanso mas largo y mas extraño de la historia. Poco antes del descanso una entrada en el medio campo de un jugador del Cádiz a López del Betis, acabo con este ultimo por el suelo, y ante el retorcimiento de dolor del mismo en el suelo y su negativa a levantarse, el señor colegiado requirió la camilla, que al llegar al lugar fue materialmente revoleada por el mismo jugador enfadado por la no señalización de la, a su entender, flagrante entrada dura, merecedora de falta y tarjeta. Ante tal respuesta del jugador, el árbitro levanto la tarjeta roja por desconsideración al mismo y tal acción provoco empujones y palabras altas de tono de otros jugadores verdiblancos al mismo, que este resolvió con 2 tarjetas rojas más que se elevaron en la noche sevillana. A continuación los altercados del publico indignado por las 3 expulsiones consecutivas, provocaron la interrupción del partido por mas de 2 horas, el tiempo que tardaron en llegar los famosos y citados en el tango de Carnaval, “pañolitos verdes” desde Córdoba, que con sus materiales antidisturbios llevaron la normalidad a la grada, no así al terreno de juego donde un Betis llevado por un joven extremo izquierdo debutante ese año llamado Rafael Gordillo, llevo a los suyos a la victoria por 3-0 ,en ese extraño partido que fue mi primer partido de Primera División.album_bet_cad_02.jpgY la ultima vez que el Cádiz visito ese mismo estadio, también en Primera, fue también el ultimo para Manolo Perez, un jugador añorado por el cadismo, porque desde que el se marcho, quedo huérfano ese puesto, y la búsqueda del mismo ha sido el Santo Grial de este Cádiz.Aquel día, también de Noviembre, de hace 3 años los cadistas veíamos como el Betis se iba deshinchando ante un Cádiz, que podía sacar mas que una pírrica derrota por 1-0, y en la banda el viejo zorro de Víctor Esparrago mandaba quemar sus naves sacando de una tacada a 2 exponentes de lo mejorcito de los últimos tiempos, Pavoni y Manolo Perez. Este ultimo saltaba nervioso, sabiendo que quizás era su ultima oportunidad para reivindicarse delante del mejor entrenador de la Historia Cadista, que no lo consideraba el mejor en su puesto. Por eso cuando el arbitro señalo el punto fatídico, a los cadistas se nos corto la respiración y nos acordamos del penalti, otro mas, fallado por Abraham Paz en la misma Sevilla un par de meses antes. Manolo Perez se apodero del balón y decidido lo incustro al fondo de la portería y quizás esa rabia que salió expedida en forma de grito de su pecho y la forma de celebrar ese gol quitándose la camiseta y corriendo con ella para celebrarlo, le costo la bronca de su entrenador, y cavo definitivamente su tumba en el Cádiz donde salió por la puerta de atrás, sin jugar mas, un mes después , siendo sustituido por Fernando Moran en ese dorsal 23 , pero no en el calificativo de “Beckham de la Bahía”.

Autor:JR

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