La cantera: ¿realidad o demagogia?

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Nadie se atreve a invertir en una política seria de cantera, pues nadie le garantiza resultado…Foto: Archivo cadistasfinos.com

Mucho se habla de la cantera cadista como de algo olvidado y a la que no se le presta la suficiente atención, y se recuerdan épocas no tan lejanas en que nuestro equipo abundaban los jugadores nacidos en la provincia. David Vidal dice que «Nosotros llegamos a Primera División con gente de aquí, la permanencia la consiguieron gente de aquí. Valoramos y trabajamos la cantera, porque no es lo mismo hablar con un danés, que con uno de aquí». Creo que comparar esa época con la actual es un craso error, y tendríamos que ver a David Vidal jugándose un descenso en el siglo XXI, y verlo también contar con los canteranos. Los equipos vascos (Real Sociedad y Athlétic Club) ejemplos de fútbol de cantera ya sabemos todos dónde se encuentran y la crisis deportiva que les persigue desde hace años. El Sporting de Gijón, valedor de Mareo, deambula por segunda división, en grave crisis económica y desde el Guaje Villa no ha salido de su Ciudad Deportiva ningún jugador estelar. El Málaga con su equipo filial en Segunda división, va camino de descender y apenas cuenta con canteranos en su plantilla. Malagueños, malagueños, poquitos… En cambio, el Arsenal le ganó el otro día 2-0 a la todopoderosa Juventud de Capello, sin un solo inglés en su equipo inicial, y con una media de edad insultante para el rival, con futbolistas menores de 23 años de Suiza, Ghana, España, Holanda, Francia, etc. En un fútbol tan mercantilizado como el actual, un chaval que promete con 15 años ya tiene 3 representantes, los clubes son SAD, y sus dueños piensan en el mismo como una Empresa y de ahí que quieran rentabilizar sus acciones lo más pronto posible. Nadie se atreve a invertir en una política seria de cantera, pues nadie le garantiza resultados. Pensar otra cosa es irreal y se nutre de sentimientos anclados en el pasado y en la melancolía de cualquier tiempo anterior fue mejor. La globalización ha llegado también al fútbol, para bien o para mal, y creo que toca afrontar esta realidad. Me daría igual disputar una final de Copa del Rey, sin ningún canterano en el equipo cadista, con jugadores de distintas nacionalidades, siempre que vistamos de amarillo y la ganemos.¡Ese Cádiz, oé!

Autor:Cadictus

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